Los Núcleos de la Mente (25)

2018may
La mente como Estructura Psíquica (Teoría de Sistemas aplicada). Sistemas y Estructuras: Sistema Emocional-Normativo-Cognitivo, y Consciente-Yoico. Construcción del Sistema Normativo Regulador. Teoría del Superyó o Teoría del Desarrollo Moral.


Vinculación entre Ética-Moral y Desarrollo Cognitivo: Es decir, más allá de lo recibido, transmitido, internalizado por aprendizaje y educación, se produce el desarrollo cognitivo, en el plano de la construcción del conocimiento, sobre la concepción de la vida, de la ética, etc. Es la teoría de la apropiación, de la individuación.

El Sistema Normativo Internalizado, asimilado, desarrollado, construido, conscienciado, apropiado, revisado, guía nuestra interpretación, comprensión, explicación. Guía nuestro mundo interno, nuestra elaboración, procesamiento, concepción. Nos afecta, desde dentro, a los patrones de reacción, sentimiento, vivencia, actuación, decisión (Sistema Regulador Consciente).

En este núcleo, sistema, estructura psíquico-cognitiva se insertan los patrones ético-normativos, los principios rectores de la conducta, lo que se debe-puede o no hacer.

Las fuentes de la ética personal provienen de diferentes lugares, así se da configuración ético-normativa. La sociedad, la educación, la filosofía, la religión, la cultura, la ciencia, la antropología y la concepción de la vida, de la persona, del mundo, etc.

Otra cuestión fundamental tiene que ver con la autorregulación. Es decir, el contenido interno que nos permite valorar y guiar nuestra propia conducta, lo que debemos o no hacer, valorando la adecuación de nuestros actos, decisiones. En este nivel es donde se pone en juego la interacción entre el impulso-necesidad-deseo y la regulación ética-moral-normativa.

En función de los contenidos, concepciones, normas internalizadas se percibirá, reaccionará, procesará. La norma, ética, moral, lo superyoico, el sistema normativo interno, guía nuestra vivencia, acción, decisión, gestión.

Eticopatía:
Ahora bien, en función de muchos factores, pueden darse desajustes, desórdenes, que afecten a estos planos. "Se me rompieron todos los valores" (jovencita de 17 años en plena crisis aguda de reestructuración postraumática).

Conductas reprobables de gestión organizacional regidas por intereses y dinámicas de abuso de poder. Dinámicas de acoso, maltrato, perversión. Comportamientos negativos que responden a intereses propios lícitos, pero que inciden dramáticamente en el funcionamiento de la comunidad (sin o con consciencia del grado de afectación). Sostenimiento de una situación-dinámica negativa, que resulta de provecho, aunque a costa del esfuerzo de los demás. Conductas que dañan al otro o a uno mismo, pero que se repiten, por el beneficio que reportan.

Cuando alguien es movido por el odio, basado o no en experiencias negativas sufridas, y justifica sus acciones tomándose la justicia por su mano, infundiendo terror en el otro (V. Terrorismo). Utilizar la violencia, agresión, más allá de la queja, crítica, denuncia social o jurídica.

La denuncia moral, ética por la vía de la Erradicación, Extinción, Eliminación. Kaizen Ético: Una vez que tenemos conocimiento de alguna atrocidad, de conductas reprobables, de dinámicas negativas graves, o de sutilezas que inciden de forma directa o indirecta en nuestra vida. Cuando se ve que determinadas personas han actuado de mala fe, inducidos por otros o movidos por sentimientos internos negativos, no podemos actuar como si no pasase nada, pero tampoco podemos erigirnos en justicieros, ni podemos ir de educadores o salvadores. Ni podemos, ni debemos.

Es más, sabemos que adoptar esos roles, papeles, sería nefasto desde diversos puntos de vista. Sobre todo, porque cuando se revela que esas personas carecen de sistemas internos reguladores, lo lógico es que apliquen su conducta contra el otro. El que diga, opine, salvo que se dé una interacción adecuada, en la que se pida ayuda, será ajusticiado, vapuleado, quemado. Esta experiencia la observamos repetidamente en muy diferentes contextos.

Hay que valorar, equilibrar y precisar muy bien qué, cómo, quién, cuándo, dónde, con quién; intervenir, hacer, hablar, decir.

Una vez que se tiene que explicitar la inadecuación, se derivan siempre, o casi siempre, una quiebra relacional. ¿Cómo vamos a "dar-ser carnaza", dar permiso para que te traten mal, para ser pared de proyección agresiva de sus negatividades? ¡Va a ser que no!

Perspectiva Relacional.- En este punto estaríamos en la dimensión sociorrelacional. A este respecto se dispone de un largo proceso de elaboración del conocimiento sobre la patología social. Son datos que derivan en una teoría explicativa de la dinámica del acoso, maltrato, conflictiva interpersonal.

La experiencia nos ha permitido aprender mucho sobre cómo funciona el grupo en este sentido. Cómo se articula el grupo en función de parámetros multidiversos, generándose de este modo dinámicas hipercomplejas que fagocitan a quien se aproxime.

La dinámica grupal, puede ser muy perversa. Salvo que se tenga una cierta autoridad sobre ella, no será fácil manejarla. En cualquier grupo se van a producir dinámicas, reacciones negativas. En la interacción personal se explicitan, emergen aspectos intrapersonales y transaccionales que modulan las relaciones. «El todo es más que la suma de las partes», y en una comprensión (vs concepción) de la sociodinámica se puede ver este principio en toda su potencia.

Es impresionante ver como, una vez que se tocan algunas fibras, puede saltar todo por los aires. El lado perverso, sádico, agresivo; las envidias, los celos, las rivalidades; las luchas de poder, los deseos de mando; toman las riendas.

Estas dinámicas se observan sistemáticamente en la interacción grupal, sea en las familias, en las de pareja, en las paterno-filiales, fraternas, de amistad, en las comunitarias, en los equipos de trabajo, en las relaciones intra e inter organizacionales o institucionales. En la interacción se ponen en juego aspectos de lo intrapersonal, de lo psicodinámico, de lo no resuelto, de las positividades y negatividades que forman parte del mundo interno. En determinados juegos de interacción pueden activarse esas dinámicas negativas, que en esa interacción pueden agudizarse.

Todo dependerá de la capacidad de los participantes para gestionar o dejarse llevar, y para defenderse o contenerse. Estas dinámicas explicarían muchas de las cosas "irracionales", sin lógica aparente, de la patología funcional. Ese funcionamiento en ordalía, el efecto chivo expiatorio, el efecto bola de nieve, el efecto cabeza de turco, etc.

Conocer las dinámicas negativas agresivas del grupo, de la interacción personal, es esencial pues es imposible la no interacción. Siempre que se da interacción van a emerger las leyes y principios derivados de la dínamis. Las emociones básicas están ahí, formando parte de la vida, en función de nuestra capacidad de autorregulación, nos dominarán más o menos, dominarán más o menos esas interacciones. Autoafirmación, automatismos, emociones acumuladas, cosas no resueltas, patrones de reacción, celos, envidias, rivalidades, deseos de venganza, rencores, atracción, rechazo, autoritarismo, sumisión, rebeldía, odio, amor, poder, mando, etc. Esas líneas ocultas están presentes, actuantes.

Se han observado de forma directa interacciones-transacciones, en las que se da emergencia por alteración del yo. Algo del mundo interno, activado en interacción transaccional, se proyecta y bloquea, domina al yo, y la persona, tan ancha, sin mediación racional-ética, actuaba diciendo, haciendo sin que le temblase una pestaña. Ahí se evidencian cuestiones de personalidad, de estructura de personalidad, de lo intrapersonal, dándose ausencia, deterioro o malformación ética individual y/o interaccional.

Son reacciones, comportamientos-dinámicas, situaciones que revelan una estructura de personalidad con mucha carga de inmadurez, ausencia ética, ausencia de desarrollo personal, ausencia de humanismo, quizá estupidez.

Aspectos oscuros de fondo les dominaban y la mediación con la realidad se ensombrecía totalmente. Ese aspecto de sí, tomaba el poder, y tamizaba el todo situacional, actuando como si no pasase nada (negación compulsión explosión perversión; V. Sobre las Estructuras Clásicas de Personalidad).

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